Actualmente en nuestro país existen varios problemas a nivel salud pública, entre algunos podemos destacar la obesidad y las complicaciones que esta puede traer, como hipertensión, diabetes y problemas cardiovasculares. En este blog hablaremos de uno en particular, que no tiene mucho foco, la enfermedad renal.

Para empezar, el riñón es un órgano par, que funciona como un lugar de depuración, ayuda a eliminar las toxinas, regulan el agua que hay en nuestro cuerpo, nivelan la presión arterial, mantienen la salud del hueso.

¿Cómo puedo saber si tengo un problema renal?

Muchas veces no le damos la debida importancia, ya que, aunque este funcione al 20% de su capacidad, podemos no presentar síntomas. Se puede llegar a medir por la eliminación de toxinas, que se observa en un estudio de laboratorio, es importante que periódicamente hagamos un chequeo en nuestra salud. Si existe alguna enfermedad como diabetes, obesidad e hipertensión arterial es más probable que exista un daño a nivel renal. Igualmente, si frecuentemente padeces de infecciones en vías urinarias que no se tratan debidamente, se genera una lesión.

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¿Cómo cuido a mis riñones?

Lo primordial es una hidratación adecuada, al ser un órgano que está en constante limpieza y eliminación de toxinas, necesita esa hidratación para funcionar, importa mucho de donde venga ese líquido, lo recomendable es que sea de agua natural, evitando bebidas carbonatadas como refresco, por el exceso de azúcar, exceso de ácido, aún si es un refresco de dieta, llegan a contener cantidades grandes de minerales que hacen que el riñón trabaje de más.

La ingesta de agua es personalizada, muchas veces se ha mantenido la recomendación de 2 litros de agua diarios, sin embargo, no es lo mismo lo que una persona con obesidad necesita a lo que una mujer deportista. Una forma de sondearlo es observar cómo está el tono de la orina, normalmente la orina es más oscura o más concentrada por la mañana, ya que el riñón la estuvo concentrando durante la noche. Durante el día, la orina debe estar clara, así nos damos cuenta que estamos hidratándonos adecuadamente.

Otro punto importante es el consumo de sodio, hay estudios donde se observa que en la población mexicana consumimos entre 10 y 13 grs de sal, cuando en realidad la Organización Mundial de la Salud recomienda 5 grs al día, esto nos lleva a reflexionar qué más allá de ponerle sal a la comida, estamos aumentando nuestro consumo de alimentos envasados con grandes cantidades de sodio. Podemos disminuir las cantidades de sal, sustituyendo por especias para darle sabor, disminuir en gran cantidad alimentos envasados como sopas instantáneas, salsas comerciales, alimentos congelados listos para preparar como pizzas, nuggets, etc. 

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La actividad física contribuye a la salud rena, mediante la regulación de la presión arterial, siempre es importante llevar una actividad física de la mano de un especialista, que personalice el ejercicio que se requiere, frecuencia y tiempo. 

Cuidar el uso de medicamentos, siempre acudir con su médico ante cualquier padecimiento, se ha demostrado que el uso prolongado de medicamentos como ibuprofeno y naproxeno, llega a causar daño en los riñones.

Mantener una dieta balanceada, asegurando una buena cantidad de vitaminas y minerales, garantiza el buen funcionamiento de todos nuestros órganos, la alimentación es una excelente forma de prevenir enfermedades a largo plazo. Consulta siempre con un especialista el plan de alimentación más recomendable para tus necesidades.

Especialista

Juan Pérez

Compañía

Especialista en Nutrición, creyente de que la alimentación es la clave para la prevención de enfermedades y de cuidar y amar el propio cuerpo. Entregada a su labor para lograr un buen trabajo en equipo, y con ello un cambio de hábitos que hagan un cambio en el estilo de vida de las personas.