Las emociones nos acompañan desde que nacemos, son esas sensaciones internas que nos impulsan a tomar acción o en ocasiones nos advierten cuando debemos tomar un descanso o una pausa ante determinadas situaciones, incluso son el vehículo que nos permite relacionarnos con los otros y nuestro entorno. Cada una de ellas tiene una razón de ser, aun y cuando estas sean displacenteras. Lo vital para lograr un bienestar emocional es saber como gestionar las emociones, sobre todo el permitirnos sentirlas, expresarlas y entender el mensaje que cada una de ellas tiene para nosotros.
Existe una gran variedad de emociones que podemos sentir a lo largo de nuestra vida, pero el día de hoy nos enfocaremos en las emociones básicas y su función. Estas son: alegría, tristeza, enojo y miedo.
Alegría
La alegría es considerada una emoción placentera, a todos nos gusta sentirnos alegres, es la manifestación de que estamos viviendo algo placentero, cumpliendo alguna satisfacción o deseo o incluso cuando estamos con aquellas personas que amamos y estamos pasando un momento agradable.
Esta emoción nos impulsa a hacer todo lo necesario para volver a experimentarla. Su función es cargarnos de energía, así como ayudarnos a reducir el estrés y sentimientos negativos que podamos estar experimentando.
Tristeza
La tristeza se caracteriza por un estado mental decaído que se expresa con apatía, desaliento y en ocasiones con dolor y llanto. Aparece cuando nos enfrentamos a una pérdida, desilusión, una mala noticia o situaciones desfavorables. Ante la tristeza solemos bajar nuestra actividad esto nos ayuda a reconectarnos con nosotros mismos y hacer esas pausas necesarias para la introspección.
Por lo tanto su función es poder conectar con la pérdida que se ha experimentado, permitiendo poco a poco la elaboración de la misma y el proceso del duelo, asimismo nos puede impulsar a buscar ayuda de aquellos que nos rodean o de profesionales.
Enojo
El enojo se manifiesta a través de sensaciones de rabia, irritabilidad o molestia y en ocasiones podemos llegar a sentir tanto enojo que se manifieste en llanto acompañado de una sensación de impotencia o frustración. Aparece ante situaciones indignantes, desagradables en las cuales sentimos que se ha traspasado un limite.
Su función es advertirnos de que algo no esta bien o con lo cual no nos estamos sintiendo cómodos, validados o respetados. Por lo tanto nos impulsa a poner limites o a tomar acción para cambiar esa situación que desencadeno el enojo, ya sea modificando la situación o alejándonos de la misma.
Miedo
El miedo es una emoción intensa que se manifiesta ante situaciones de amenaza o peligro, nos incita a protegernos o actuar para salir de eso amenazante, en ciertas ocasiones el miedo puede ser tan intenso, que paradójicamente, nos paraliza. Pero su función es ser una señal de alerta que nos avisa que algo no esta bien o que corremos algún peligro.
En general las emociones pueden ser nuestras aliadas si nos permitimos sentirlas y entender el mensaje y su función que tienen para nosotros. En muchas ocasiones puede pasar que sentimos la emoción y hasta un tiempo posterior entendemos la situación o circunstancia que la desencadenó, pero conforme vayas siendo más consciente de las mismas veras que será más fácil entender en el momento oportuno la emoción que se manifiesta y por lo tanto actuar en consecuencia de una manera más asertiva.
Especialista
María del Carmen Soria
Psicóloga
Psicoterapeuta psicoanalítica, con amplia experiencia clínica. Tiene la convicción de ayudar a aliviar el malestar emocional que aqueja a las personas por diferentes situaciones para que alcancen un bienestar integral.