Caminar suele pasar desapercibida como una forma efectiva de ejercicio, pero caminar unos minutos al día puede transformar tu salud, cuerpo y mente. Quema calorías, mejora la salud del corazón y estar al aire libre aporta tanto la dosis necesaria de vitamina D como un aumento de endorfinas y buen humor.
¿Cuáles serían algunas razones por las que deberíamos considerar
las caminatas como parte de nuestra rutina?
las caminatas como parte de nuestra rutina?
1. Caminar es una forma de ejercicio de bajo impacto y que ayuda a mejorar tu salud cardiovascular. Si se busca la pérdida de peso, comenzar caminando despacio es una buena idea.
Cuando tu cuerpo ya se haya acostumbrando a caminar largas distancias, prueba a completar un kilómetro más rápido que la semana anterior y luego más rápido que el ritmo medio de caminata (aproximadamente 10-12 minutos por kilómetro). A medida que se vaya progresando el ritmo, ya estarás haciendo ejercicio aeróbico.
Otra opción para entrar a una zona de entrenamiento aeróbico es por intervalos, es decir, alternar periodos de caminata rápida con caminata más lenta. Esta opción ayuda a quemar más calorías que una caminata regular.
2. Ayuda con el fortalecimiento de los músculos. Caminar hace trabajar distintos grupos musculares del tren inferior: los cuádriceps, los glúteos, la pantorrilla y los tobillos. Si se añade resistencia es aún mejor, por ejemplo; caminar cuesta arriba o aumentar la inclinación durante tu entrenamiento en la caminadora, aumenta la activación de estos grupos musculares, especialmente de los glúteos.
3. Fortalece el sistema inmune. Ahora que el ritmo de vida vuelve lentamente a la normalidad y regresamos a la rutina, es esencial mantener el sistema inmunológico fuerte todo el año. El ejercicio regular permite desarrollar más células T (o linfocitos T) que las personas que llevan una vida sedentaria.
¿Sabias que caminar como forma de ejercicio puede ayudar a combatir un resfriado común? Un estudio concluyó que las personas que caminan 20 minutos al día al menos cinco días a la semana, están en un 43% menos días enfermas que las que solo hacen ejercicio una vez por semana o no lo hacen.
4. Mejora el estado de ánimo. Cuando haces ejercicio, estás reduciendo los niveles de las hormonas del estrés del cuerpo, la adrenalina y el cortisol. Afecta positivamente a un grupo de glándulas productoras de hormonas llamado eje hipotálamo-hipófisio-suprarrenal (HPA, por sus siglas en inglés). El eje HPA es responsable de la respuesta del cuerpo al estrés y regula procesos como la digestión, el sistema inmunitario y las emociones.
Caminar 30 minutos diarios puede reducir los síntomas de depresión en un 36%.
5. Mejora la capacidad de concentración y memoria. Un estudio concluyó que caminar 40 minutos 3 veces por semana, protege el área cerebral relacionada con la planificación y la memoria.
6. Caminar ayuda a reducir enfermedades cardiovasculares. Realizar esta actividad de 30 a 60 minutos diarios reduce drásticamente el riesgo de padecer una enfermedad cardiaca.
7. Mejora la coordinación y el equilibrio. Con el tiempo, la coordinación y el equilibrio pueden mejorar gracias a el fortalecimiento de los músculos del tren inferior. Para personas mayores, esto es especialmente importante para prevenir caídas.
Es importante recordar que no tienes que hacer una caminata enérgica para mejorar tu salud. Ser constante y hacer ejercicio moderado permite al cuerpo tener una mejor recuperación de enfermedades.
Tanto si caminas para bajar de peso, para alcanzar los 10.000 pasos al día o para prepararte para el running, caminar es una forma perfecta de mantener tus objetivos al día y de añadir variación a tu rutina.
Especialista
Katya Mendoza
Fisioterapeuta
Fisioterapeuta egresada de la Universidad Tecnológica de México. Comprometida con el cuidado y la prescripción de ejercicio basada en las necesidades de cada paciente. Considera que el realizar actividad física y ejercicio ayuda a la estabilidad de una calidad de vida óptima.