Si los motivos para hacer ejercicio son muchos, muchas también son las excusas que solemos poner para no hacer ejercicio. A continuación te muestro como detectar tus propias excusas y tomar acción:

NO TENGO TIEMPO:

No se trata de entrenar para las olimpiadas ni para correr un maratón, con dedicar 30 minutos al día empezarás a notar los resultados. Si no tienes tiempo para el gimnasio quizá puedas hacer ejercicio en casa.

LLEVO MUCHO TIEMPO SIN HACER EJERCICIO Y ME DA MIEDO LESIONARME O QUE ME PASE ALGO:

Si tienes mucho tiempo sin hacer ejercicio no te preocupes ni te desesperes. Mi mejor consejo es tomarlo con calma.

Debes empezar poco a poco y de forma moderada. Mucha gente se emociona y quiere hacer ejercicio con una intensidad que los deja sin poder moverse durante una semana. Que eso no te pase a ti. Comienza poco a poco no hay prisa, es mejor que disfrutes hacer ejercicio porque solo de esa manera vas a querer volver a hacerlo.

NO PUEDO HACER DEPORTE PORQUE ME DUELE LA RODILLA:

Si este es tu caso, la cuestión no debería ser si practicar o no ejercicio, si no qué actividades puedes realizar. La bicicleta, por ejemplo, requiere menos esfuerzo en las articulaciones y músculos que trotar. Apóyate de tu terapeuta físico para encontrar la mejor opción. Además, el practicar ejercicio estabiliza las articulaciones, previene la osteoporosis y disminuye el riesgo de accidentes caseros como consecuencia de pérdidas del equilibrio o caídas.

EL CLIMA:

Mucho frio, demasiado calor.

Aquellos que le escapan al ejercicio siempre encuentran alguna excusa para no salir de su sillón y el clima es una justificación perfecta. Sin embargo, si se realiza actividad física en un lugar cerrado, el clima no debería servir de excusa para no hacerla.

NO ME GUSTA EL DEPORTE:

¿No te gusta ningún deporte? Seguro que encuentras alguno que te parezca divertido, es cuestión de buscar el que se adapte mejor a tus gustos.

SI VOY AL GIMNASIO HARÉ EL RIDICULO PORQUE NO ESTOY EN FORMA:

Te sorprendería ver la cantidad de gente que va a un gimnasio, cada uno con un nivel de forma física diferente ¡y no pasa nada! Todos son bienvenidos porque todos empezaron un primer día.

Únicamente avisa al entrenador de que es tu primer día para que no te exija lo mismo que al resto.

SI YA DETECTASTE CUAL ES TU EXCUSA HAZ UN TRATO CONTIGO MISMO Y ¡TOMA ACCION!

¡Mucha suerte!

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