Si estás leyendo este blog seguro ya iniciaste tu proceso de pérdida de peso. Si aún no lo haces y estás indeciso, te ayudará mucho a clarificar ideas y atreverte a dar ese importante paso hacia el cuidado de tu salud y no seguirlo postergando más.

Esto nos lleva a pensar en la infinidad de veces que nos hemos detenido a llevar a cabo lo que queremos por incertidumbre, dudar sí podemos lograrlo o no, o por temor a fracasar en el intento. Con la pérdida de peso sucede lo mismo, intentamos encontrar el momento perfecto para iniciar; aquel donde no haya obstáculos que nos impidan alcanzar nuestros objetivos y donde el terreno sea lo más idóneo para lograrlo fácilmente sin que cueste trabajo, esfuerzo o tiempo porque es lo que menos tenemos y queremos invertir.

Lamentablemente, ese momento aunque quisiéramos que existiera, no existe. Si esperas a que existan las condiciones perfectas para empezar estarás postergando una y otra vez el inicio. Con ello, estarás complicando cada vez más tu estado de salud, aunado a estar incrementando cada vez más peso. Si eran 10 kilos los que debías perder, retrasar el inicio te puede llevar a que se conviertan en 15, 20, 30 o más kilos, los que estarán mermando tu estado de salud. Y no solo eso, también convertirá que tu meta u objetivo tome mucho más tiempo de alcanzar. 

Un proceso que pudo ser hace meses, termina siendo aplazado porque se acercaban las vacaciones de verano, venía septiembre con su pozole y tequila; octubre y noviembre con el dulce pan de muerto; y diciembre con sus posadas, cena de navidad y año nuevo. Ahí piensas se acabó el año y ahora sí podemos iniciar pero de pronto se avecina enero con su rosca de reyes; febrero con el día de la Candelaria y sus tamales. Tal vez en marzo y abril sea más fácil porque aparentemente no tiene festividades pero seguro algún cumpleaños de alguna persona cercana a ti o tu propio cumpleaños o la boda de tu mejor amiga, pero pronto llegará mayo con la celebración del Día de las Madres y por último junio con el Día del Padre.

Y así, se ha pasado un año más donde no hubo mejora en tu salud y menos pérdida de peso porque no encontraste el momento correcto, aquel que no tuviera obstáculos para lograrlo. Entonces podrás tener claro que aquello que está saboteando el inicio de tu proceso son las excusas que pones para no hacer lo que tenías que haber hecho desde hace mucho tiempo y con ello sentirte cómo querías sentirte.

Las personas y momentos especiales estarán y esas personas entenderán el por qué no puedes en ese momento comer o tomar lo que estén consumiendo ellos, porque eres tú quién está tomando la decisión que tú quieres tomar y esa decisión de hacerlo sabes te llevará a alcanzar tu objetivo.

Y si aún teniendo clara tu decisión se presenta alguna situación que te haga romper tu plan de alimentación, plantéate metas – acciones que te ayuden a acercarte más al objetivo que estás buscando. No te rindas ante la adversidad, toma aquellos obstáculos como parte de tu historia, de tu proceso, los cuales son los cimientos para construir aquello que quieres lograr. No busques la perfección porque de tanto buscarla te frustrará ver que no es alcanzable, que el contexto en el que te desenvuelves quizá lo hace menos alcanzable.

Quizá lo que hoy sí puedes lograr sea tomar agua completa e ir a comprar tu súper para ya iniciar con tu plan de alimentación. Lavar, desinfectar, picar y guardar tus alimentos para al día siguiente llevarlos contigo y comerlos. Una vez logrado esto, avanzar en tomarte los complementos necesarios (vitaminas, minerales, etc.). Después cuidar al 100% tu desayuno y sólo comer lo indicado. A los dos días, lograr tu colación exacta y así ir avanzando cada 2 días.

No te detengas hasta lograr ejecutar todo lo necesario para obtener aquello que tú quieres. No seas tan exigente contigo mismo. Comprende que cada proceso es diferente e incluso cada momento a lo largo del mismo es distinto, que te hará llegar a lo sostenible porque habrás atravesado por lo más complicado y no te rendiste. De esta manera en algún momento te darás cuenta de que ya logras hacer lo suficiente para perder el peso que quieres perder y que no sigues dejando para el mañana lo que ya puedes empezar a hacer hoy.

Para ello en VIME encontrarás apoyo desde 3 áreas para ir ayudándote a cosechar aquello que con paciencia, esfuerzo, dedicación y constancia vayas logrando, siempre acércate a tus especialistas que son ellos quienes te ayudarán a ver un panorama más amigable.