Muy a menudo escuchamos que sólo las personas que acostumbran a ingerir bebidas alcohólicas tienen hígado graso o cirrosis, probablemente escuchamos de alguien que lo padeció y que la enfermedad fue a causa de ese hábito tóxico. Pero, ¿qué es realmente el hígado graso (esteatosis hepática) y por qué se produce?
La esteatosis hepática etílica se produce por la ingestión excesiva de alcohol en un periodo que puede variar entre semanas, o a veces, años. Consiste en un cúmulo de grasa en el hígado a consecuencia de las alteraciones que puede producir el alcohol, sin embargo, no es la única forma de padecer dicha enfermedad y no precisamente tienes que habituar el alcohol para presentarlo.
Desde 1980 se empezó a utilizar el término de “Hígado graso no alcohólico”, como la enfermedad crónica más común en el mundo tras observar que un grupo de personas sin antecedentes de ingesta de alcohol. Ellos presentaban los mismos signos que quienes si lo consumían; se sabe que es una acumulación excesiva de grasa en forma de triglicéridos en el hígado. En las últimas décadas ha aumentado su prevalencia y se asocia a otras enfermedades como la obesidad y la diabetes mellitus tipo 2. Algunos factores de riesgo pueden ser medicamentos tóxicos pero también enfermedades como el hipotiroidismo o el Síndrome de Ovario Poliquístico, aunque la dieta es el factor más relevante para padecerlo: ayunos prolongados, bajo aporte de proteínas y sobre todo una dieta rica en carbohidratos. ¿Te suena?
A pesar de que físicamente no se presenta algún signo, en ciertas personas puede manifestarse como cansancio o dolor abdominal, además de aumento de grasa corporal, hipertensión arterial, alteraciones en colesterol y triglicéridos, intolerancia a algunos azúcares, deficiencia de algunas vitaminas y hasta incluso alteraciones en la microbiota.
Si bien el tratamiento puede iniciarse con algunos fármacos para controlar las condiciones asociadas (obesidad, hipertensión, resistencia a la insulina, etc.), el tratamiento más efectivo es tener un control de peso saludable, actividad física y con ello, una alimentación saludable con bajo aporte de grasas y carbohidratos, así como un buen aporte de proteínas, con ello se detecta una disminución de la inflamación en el hígado.
Es importante que te acerques con un especialista en Nutrición, que te guie a un plan de alimentación personalizado en el que puedas tener mejoría, pero aquí te dejo algunos de los nutrientes principales que son benéficos ante el hígado graso:
● Grasas monoinsaturadas (aceite de oliva, aguacate, nueces)
● Ácidos grasos poliinsaturados (pescados, mariscos, aceites vegetales)
● Proteínas de origen vegetal (cereales integrales, legumbres, nueces, verduras)
● Carbohidratos “complejos” (verduras, cereales integrales, semillas)
¿Y cuáles son aquellos alimentos que no son recomendados?
Aquellos que contengan grasas saturadas (manteca, aceite de coco o palma), alimentos procesados, grasas trans (postres, cremas, panes), embutidos (salchichas, chuleta, chorizo etc.), carbohidratos simples (bebidas azucaradas, mieles, jarabes etc.).
Por otro lado, es de suma importancia la suplementación que, si bien depende de cada persona y necesidad clínica, es importante el consumo de Omega 3 que ayuda a reducir la inflamación y nivel de grasa en el hígado; vitamina E que se asocia con la disminución de parámetros clínicos como triglicéridos y colesterol; vitamina D que es antiinflamatorio; así como selenio, aminoácidos, vitamina A, C, y del complejo B, probióticos, entre otros.
Así que, aunque el alcohol no sea la causa principal, la dieta nos puede llevar a un estilo de vida saludable o bien, traernos muchas enfermedades como lo es el hígado graso. Te invitamos a que, con ayuda de tu especialista en Nutrición, disminuyamos la incidencia de este tipo de padecimientos. ¿Te unes?
ESPECIALISTA
Betzi Pimentel
Nutrióloga
Egresada del Instituto Politécnico Nacional, ha descubierto su pasión por ayudar a las personas a mejorar su estilo de vida y hacer que se sientan acompañados en el proceso. La nutrición siempre ha estado muy presente desde su educación básica y ahora busca transmitirlo sus pacientes.