La asertividad, es un estilo de comunicación que consiste en expresar nuestros sentimientos; deseos; pensamientos, de manera amable, franca y directa, logrando decir lo que queremos sin atentar contra los demás, llegando a un acuerdo con los otros, es lo que coloquialmente conocemos como el ganar-ganar; tu ganas, yo gano.

La asertividad nos sirve en todos los aspectos de nuestra vida, ya que nos permite mantener relaciones más sanas y estables con las personas que nos rodean. El ser asertivo nos permite expresar nuestra opinión o cuando algo no nos parece sin llegar a ser agresivos o dejar pasar las cosas como si nada pasara, pero quedándonos con una sensación de frustración y enojo.

El ser asertivo es una habilidad que todos podemos desarrollar con práctica, a continuación, te dejo algunos tips para que seas una persona más asertiva.

• El primer paso es conocer y reconocer tu estilo de comunicación: ¿Cómo sueles reaccionar ante las situaciones sociales? ¿Sueles quedarte callado? O ¿Impones tu opinión y sentimientos a los demás? El conocer tu estilo de comunicación te permitirá tomar mejores decisiones.
• Toma en cuenta que las personas no pueden leerte la mente, por lo tanto, no supongas: Las personas no saben que es lo que piensas ni qué es lo que sientes a menos de que lo compartas y lo hagas saber.
• Recuerda tu objetivo: Cuando expresamos nuestra opinión o sentimientos debemos tener claro que es lo que queremos, ¿cuál es el objetivo que estamos buscando? Entre más claro tengas qué es lo que quieres es más probable que lo obtengas. Recuerda que si te ves inmerso en alguna discusión el objetivo no es ganar la discusión si no llegar a algún acuerdo.
• Refiérete a los hechos y no hagas uso de los juicios: Si te refieres a hechos objetivos verás que es más fácil la comunicación, ya que si sueles hacer uso de juicios la otra persona puede sentirse ofendida o juzgada y deje de escucharte y no se logre ningún acuerdo.
• Sustenta tus sentimientos y opiniones: Cuando expresamos alguna emoción u opinión y damos una razón real a esto es más probable que consigamos lo que queremos o que realmente nuestro interlocutor nos entienda, generamos empatía con la otra persona y verá que no sólo se trata de un capricho.
• Habla desde tu persona y no desde la otra: La clave de la comunicación asertiva es hablar desde lo que tú piensas o desde lo que tú sientes, ya que si sueles hablar desde el otro se puede interpretar como una acusación o reclamo y la persona se puede sentir atacada y cerrada ante el diálogo. Por ejemplo: En lugar de decir “Me has tratado mal en la reunión” puedes decir “Me he sentido mal con la forma en la que me has tratado en la reunión” En lugar de centrar el punto en el comportamiento del otro llevas la atención a tus emociones.
• Conoce las cuatro fases de la asertividad: 1) Hechos: Describe la situación o la conducta. 2) Sentimientos: Explica cómo te hace sentir esa conducta o situación. 3) Consecuencias: Describe las consecuencias de seguir con esa situación o conducta que estás señalando. 4) Solución: Qué propones para mejorar la situación o conducta. A qué acuerdo se puede llegar para que las dos partes se sientan escuchadas y validadas o para que haya un cambio positivo para ambas partes. Ganar – Ganar.

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