¿Cuántas veces no te has detenido para realizar alguna actividad nueva, ir a lugares distintos o conocer personas por el hecho de no sentirte capaz de hacerlo?
Casi siempre la respuesta a estos cuestionamientos es: sólo hazlo. La realidad es que para dar ese primer paso puede que se imaginen previamente mil imágenes, ideas o situaciones en tu cabeza que te impidan el moverte o realizar algo diferente a nuestra ya acostumbrada zona de confort.
El ser humano a medida que crece va creando su identidad a partir de las experiencias y motivaciones que va teniendo a su alrededor. Cuando algunas experiencias resultan especialmente negativas para nosotros es probable que se refleje en todo lo que intentemos hacer posteriormente.
Digamos que si en algún momento alguna experiencia que involucre estar con otros nos llenó de vergüenza o miedo probablemente se reflejará en nuestra capacidad para entablar relaciones sociales o hablar en público. Seguramente nuestro sistema nervioso incluso entrará a escena produciendo sudoración y náuseas, además de la incontrolable idea de huir de ahí.
Una forma de conocer cuáles son las razones por las cuales nos pueden llenar de angustia las situaciones nuevas es acudir a terapia psicológica para así historizar cuales han sido las experiencias y distorsiones que podamos tener de ellas pues éstas influyen directamente en nuestra manera de ser.
Al acudir a terapia no sólo conocemos nuestros miedos, vamos desentrañando desde donde han echado raíz y podemos juzgar desde las nuevas experiencias si estos pueden seguir haciéndonos daño o son ya irracionales para nuestra actualidad.
El permitirnos hacer cosas diferentes no sólo nos ayuda a contrarrestar los efectos de la ansiedad que provocan las fantasías que nos hacemos de lo que pasaría si sucede tal o cual cosa según nuestras expectativas. Además, nos ayudaría a poder generar nuevas experiencias que ayuden a crearnos historias diferentes sobre nosotros mismos y nuestras capacidades tanto físicas como intelectuales.
No olvidemos que el ser humano está siempre en contante cambio y crecimiento por lo que crear nuevas historias de vida para nosotros mismos siempre es posible, todo radica en intentarlo.
Especialista
Montserrat Ramírez
Psicóloga
Psicóloga y psicoterapeuta, cálida, atenta, responsable, empática y comprometida. Cree en la necesidad de impulsar la terapia psicológica como un espacio necesario para mejorar la vida. Promueve el que más personas puedan conocer los beneficios de un espacio terapéutico. .