En esta ocasión estaremos hablando sobre cómo reconocer y diferenciar los tipos de incontinencia, para ello el primer paso es un buen diagnóstico. Sabiendo entonces que hay distintos tipos de incontinencia y cada una tiene una solución diferente, desde ejercicios, fármacos y combinaciones de ambas terapias, hasta cirugía.
➤ La incontinencia de esfuerzo representa dos tercios del total y responde con éxito a la rehabilitación mediante ejercicios, sobre todo en casos leves y moderados. En cualquier caso, la recuperación es proporcional al grado de incontinencia. Las leves se curan en el 80%, mientras que en las severas el porcentaje es más bajo.
➤ La incontinencia urinaria por urgencia es aquella en la que se refiere una necesidad repentina e intensa de orinar, seguida de una pérdida involuntaria de orina. Es posible que esto ocurra inclusive en la noche, obligando a despertar por varias ocasiones.
➤ Mientras que la incontinencia por rebosamiento se experimenta un goteo de orina frecuente o constante, debido a que la vejiga no se vacía por completo.
➤ La incontinencia funcional es considerada como una discapacidad física o inclusive mental que puede ser derivada por Alzheimer o Parkinson, lo cual te impide llegar al baño a tiempo. Por ejemplo, si tienes artritis grave, es posible que no puedas desabotonarte el pantalón lo suficientemente rápido.
➤ Por último, la incontinencia urinaria mixta es aquella en la que experimentas más de un tipo de incontinencia urinaria; la mayoría de las veces esto se refiere a la combinación de incontinencia de esfuerzo e incontinencia urinaria por urgencia.
Los programas de ejercicios de fortalecimiento no son invasivos, no tienen riesgo y aportan soluciones eficaces siempre que su práctica sea constante. Abordaremos dos de los principales ejercicios que se realizan como programa de ejercicio preventivo o terapias físicas, tomando en cuenta que siempre se debe de tener una valoración previa por un especialista.
Ejercicios de fortalecimiento de la musculatura del suelo pélvico
Son ejercicios de fortalecimiento de los músculos del suelo pélvico descritos por el Doctor Kegel hace medio siglo, en la década de los cuarenta, y estos consisten en la contracción de la musculatura estriada del suelo pélvico. Hay varias maneras de realizar los ejercicios de Kegel pero todos se basan en contraer y relajar el músculo pubococcígeo con unas determinadas repeticiones.
Un ejemplo de ejercicios de suelo pélvico sería realizar tres series de 8 a 12 contracciones suaves y mantenidas durante 6 a 8 segundos a lo largo de 3 a 4 veces por semana. Se debe destacar que, al contrario de lo que se pueda pensar, estos ejercicios nunca se deben realizar durante la propia fase de micción, mejor conocido con el nombre genérico de “el stop test”, pues puede favorecer la aparición de infecciones urinarias.
Técnicas hipopresivas
Las técnicas hipopresivas son ejercicios posturales y respiratorios creadas por el Dr. Caufriez en los años 80 cuyo objetivo abarca desde las recuperaciones postparto hasta la regulación de tensiones músculo esqueléticas. Son utilizadas en la terapia fisioterapéutica especialmente en el ámbito uro-ginecológico u obstétrico para el fortalecimiento de la musculatura del core.
Actualmente algunos centros deportivos y entrenadores personales han incorporado su vertiente para el deporte, mejor conocidos como los hipopresivos dinámicos como programa general dentro de la planificación del entrenamiento. Los ejercicios se realizan adoptando diferentes posiciones en base a unas determinadas pautas de ejecución que facilitan y acentúan el efecto hipopresivo
El objetivo fundamental del tratamiento debe ser siempre mejorar la calidad de vida de las pacientes, por lo que es prioritario conocer sus preferencias, el tipo de vida que llevan y sus circunstancias personales. En todos los casos deben analizarse con las pacientes las ventajas e inconvenientes que conlleva cada una de las opciones terapéuticas. Por ello es de vital importancia el acercamiento con un especialista.
Especialista
Alejandra Cazares
Fisioterapeuta
Fisioterapeuta por la Universidad Tecnológica de México. Cuenta con una Certificación en Diseño de Programas de Entrenamiento en paciente con enfermedad cardiovascular. Considera que la motivación es lo que pone en marcha y el hábito es lo que mantiene el movimiento.