¿Alguna vez te has preguntado por qué se llama ejercicio personalizado o individualizado? Pareciera que estos dos términos son sinónimos, pero no es así. Existe una clara diferencia entre estas dos modalidades de prescribir ejercicio y en este texto trataré de explicarte qué son y para qué sirve cada una de ellas. 

Para comenzar, señalaré cuáles son las características de cada una de estas dos modalidades del ejercicio iniciando con el ejercicio personalizado. 

El ejercicio personalizado consta en abarcar los aspectos o características que la persona desea trabajar, ya sea a nivel estético como el cambio de la apariencia del aspecto físico de alguna sección específica; o a nivel de condición física como el desarrollo o mantenimiento de alguna capacidad específica llámese fuerza, potencia, equilibrio, flexoelasticidad o generar un cambio de la salud. 

Por otro lado, el ejercicio individualizado va a estar enfocado en atender las necesidades de la persona a un nivel fisiológico. Por ejemplo, se puede especificar un tipo de prescripción del ejercicio para alguien que sufre de hipertensión arterial; problemas hormonales como el hiper o hipotiroidismo; algunas enfermedades autoinmunitarias como la artritis reumatoide; o de acuerdo a alguna lesión a nivel del sistema musculoesquelético. 

Como pueden observar, si existen diferencias entre estas dos modalidades del ejercicio ya que la primera atiende los gusto del paciente y la segunda sus necesidades. 

Ahora bien, ¿cuál de las dos es más importante a la hora de planificar una prescripción? La respuesta es que ninguna de las dos es más importante que la otra, ya que si el objetivo del plan de entrenamiento es generar un cambio de hábitos, lo más conveniente es atender los gustos de la persona mientras es llevada de la mano, así como atender de igual manera sus necesidades metabólicas y fisiológicas  

No obstante, es de suma importancia atravesar por una adecuada y minuciosa valoración para determinar qué tipo de ejercicio y plan de prescripción es mejor. Siempre será mejor uno agradable y cuya participación de la persona sea lo más activa posible para potenciar aún más la pérdida de peso sin complicar otras áreas.   

Por último, vale la pena destacar que no todo tipo de ejercicio o plan de ejercicio va ser igual de beneficiosos para todos. El plan que le funcionó a una mujer posiblemente se quede corto para un hombre, y es donde una vez más, sale a relucir la importancia de la personalización y la individualización del plan de ejercicios. 

Espero que esta información sea de utilidad para comprender un poco más lo que se realiza dentro del método interdisciplinario y específicamente dentro de la Terapia de Activación. 

Y recuerda: 
“Las ganas de mejorar 
no son nada sin las ganas de cambiar”.