¿Sabías que el Síndrome de Ovario Poliquístico afecta aproximadamente al 15% de las mujeres en edad fértil y es considerado la primera causa de infertilidad?

Primero iniciemos describiendo al SOP (Síndrome de Ovario Poliquistico) se le denomina “síndrome” debido a que es un conjunto de signos y síntomas que sucede cuando las hormonas sexuales masculinas (llamadas andrógenas) se encuentran más elevadas de lo que deberían de estar. Esto ocasiona alteraciones en periodos menstruales, problemas de la piel como el acné, mayor producción de vello facial o corporal, problemas de fertilidad y aumento de peso. Aunque estas manifestaciones clínicas pueden variar, también es importante confirmar o descartar el síndrome por medio de estudios clínicos.

El SOP también puede conducir a otras afectaciones como la resistencia a la insulina, sobrepeso y obesidad, aumento de colesterol y triglicéridos, diabetes y síndrome metabólico.

¿Por qué es tan importante mencionar la resistencia a la insulina? Una de las funciones de la insulina, hormonalmente hablando, es que favorece la producción del óvulo. Al no haber una maduración en estos, se generan quistes en los ovarios, lo que provoca el Síndrome de Ovario Poliquístico. Teniendo en cuenta que la insulina se produce al consumo de los carbohidratos, se debe de mantener un control en la calidad y cantidad de los mismos para evitar que haya una resistencia a la insulina.

Debido a la relación que esto tiene con el exceso de peso y el riesgo a una enfermedad como diabetes (ya que la resistencia a la insulina  incrementa el  riesgo de 2 a 5 veces más de desarrollarla), se considera ideal una dieta baja en carbohidratos para controlar el SOP. Aunado a esto, se recomienda una dieta cetogénica baja en grasa para que la disminución de peso sea mayor en grasa y con esto lograr una estabilidad en temas hormonales, como la regulación de los ciclos menstruales al modificar directamente la funcionalidad de las hormonas. También se posee un riesgo mayor de aumento en colesterol y por ende, un riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.

Hay una variedad de tratamientos farmacológicos que se llegan a recomendar para esto, sin embargo, pueden tener diferentes efectos secundarios como pérdida de cabello, deficiencia de vitaminas y minerales, cambios de humor, riesgo de coágulos, malestares gastrointestinales, entre otros. Pero no te preocupes, todo esto se puede prevenir y controlar con el cambio de hábitos alimenticios y de actividad física. Como habíamos abordado, se sugiere una dieta baja en carbohidratos simples como herramienta funcional. La dieta cetogénica cumple con este parámetro para que se le considere primordial en estos casos. Este tipo de dieta hace un cambio en el metabolismo, para cambiar la vía de energía por excelencia (carbohidratos) por una vía alterna, que es la grasa que está acumulada y almacenada en el cuerpo.

Hay que tener mucha precaución en elegir qué tipo de dieta cetogénica va a utilizarse, pues hay que evitar la que es alta en grasas saturadas y proteínas. Lo conveniente es elegir las bajas en grasas y con un calculo de proteína adecuado y personalizado al peso, edad, talla, etc.


¿Qué pasa con la suplementación?

En una dieta cetogénica se utilizan suplementos que funcionan de igual forma para tratar el Síndrome de Ovario Poliquístico ya que son una manera de garantizar que el cuerpo obtenga los nutrientes necesarios para equilibrar las hormonas y reducir los síntomas, algunos son los siguientes:

Omega 3:

Este suplemento ayuda a reducir la testosterona y a regular el ciclo menstrual por su capacidad antiinflamatoria. Recordando que los quistes son una forma de inflamación. Ayuda al metabolismo de la insulina.

Calcio + vitamina D: 

Se han observado beneficios sobre el factor antiinflamatorio y disminución de estrés en las células.

Magnesio:

Mejora el estrés oxidativo por su efecto antioxidante.

Probiótico:

Actualmente, con los hábitos que han ido cambiando durante los últimos años, se ha registrado una mayor alteración en la salud intestinal. Las mujeres con SOP, tienden a tener menor variedad de bacterias intestinales, algo que parece estar relacionado con una elevación en los niveles de testosterona. Los probióticos ayudan a aumentar esa diversidad en estas bacterias, mejorando absorción de nutrientes, desinflamación, mejora en capacidad cerebral, mejora en estado de ánimo, entre otras cosas.

Así demostramos que llevar una dieta cetogénica de manera favorable y adecuada, no solo se puede utilizar para pérdida de peso, sino también como auxiliar en el control de algo tan complejo como lo es el Síndrome de Ovario Poliquístico.